Orgullo de nuestro estado, comparte cultura, historia y bondades naturales
Ezequiel Montes es un municipio pequeño con grandes riquezas, situado entre los valles centrales y el semidesierto queretano, de clima agradable la mayor parte del año.
El atractivo turístico más visitado en el municipio es la Peña de Bernal, el monolito más grande del mundo, nombrada una de las 13 Maravillas Naturales de México y Área Natural Protegida.
Pueblo Mágico
Bernal fue nombrado pueblo mágico en el 2006
Aparte de la Peña de Bernal, otros atractivos culturales en el lugar, son el Museo de La Máscara, el Museo del Cine Nacional Rosalío Solano, el Museo de las Ánimas y la Casa Museo del Dulce, en este último no solo aprendes de los dulces tradicionales, sino que también puedes comprarlos y degustarlos.
Villa Progreso, una delegación importante en el municipio esconde entre sus rincones una de las culturas milenarias más representativas de nuestro estado. La tribu de hñähñus provenientes de Tecozautla se asentaron en esta zona cerca del año 1942 y se han convertido en un tesoro cultural y gastronómico en Querétaro.
Este pequeño poblado resguarda antiguas capillas otomíes, talleres que producen ixtle, y otros que fabrican cerámica, como Cerámica Servín.
En el corazón de la Ruta del Arte, Queso y Vino
En la tierra generosa de Ezequiel Montes convergen todas las características geo climáticas óptimas para el cultivo de la vid, por ello la vitivinicultura ha prosperado como actividad económica.
Los viñedos más destacables de la zona son La Redonda, Finca Sala Vivé by Freixenet, De Cote, Viñedos Azteca, Bodegas Vaivén y Bodega Bothë, esta última ubicada en Villa Progreso.
Además del buen vino producido en la región, Ezequiel Montes destaca por tener una gran variedad de platillos elaborados con técnicas culinarias prehispánicas, e ingredientes que solo encuentras en esta zona del semidesierto.
Un imperdible es el nopal en penca y las gorditas de maíz quebrado.
Un pueblo artesanal
Talleres heredados de generación en generación, se vuelven parte de la historia de la región.
Además del ixtle y la cerámica producidas en Villa Progreso, en Ezequiel destacan los tejidos de lana elaborados en antiguos telares, sobre todo los producidos en La Aurora, uno de los talleres más longevos de Bernal, dedicado a crear jorongos, cobijas, tapetes y todo lo necesario para el frío.
