El Centro Histórico de Querétaro se ha vestido de gala para celebrar la muerte. Así es como el mexicano ha interpretado eso que todos tenemos seguro, eso que, en cierto sentido, le da razón a la propia vida.
El Mictlán, representación mexica de la vida postmortem, ha emergido a la superficie para ser visitada por los vivos, esos que rinden culto a la transición que todo ser humano dará al final de su camino por este mundo.
El Grupo Aztlán forma parte de esta celebración de Día de Muertos que se ha montado en el primer cuadro de la ciudad. Su performance tiene la intención de difundir la cosmovisión mexica en torno a la muerte.
Se trata de representar los nueve estadios del Mictlán, un recorrido que de manera presencial se puede realizar desde el Jardín Guerrero hasta la Plaza de Armas, en donde se ubica el altar monumental y se realizan las presentaciones de Grupo Aztlán.
Durante la presentación se explican los niveles del Mictlán, la narrativa va acompañada por actores que expresan con su cuerpo este camino. Se acompaña con música y danzas.
Algunos de las instrumentos son las sonajas, silbatos, caracoles, réplicas de las herramientas con las que las culturas precolombinas realizaban sus ceremonias.
Para los integrantes del Grupo Aztlán ha sido satisfactorio descubrir que existe un interes por parte de los visitantes, principalmente han encontrado en su público a menores de edad, mismos que han bailado a la par de los propios actores.
Grupo Aztlán tiene el objetivo de, a través del arte, difundir la cultura prehispánica y sus diversas formas de expresión; algo que sin duda ha enriquecido el arte mexicano desde diferentes niveles.
Hasta el 6 de noviembre continuarán las presentaciones y actividades relacionadas al Día de Muertos en el Centro Histórico de Querétaro.
