Bodegas Bothë vivió un fin de semana de celebración a la tierra, a los orígenes y a su gente. Por primera vez organizaron una fiesta de la vendimia para agradecer por sus frutos y sus vinos.
El pueblo de Villa Progreso, en el municipio de Ezequiel Montes, va siempre ligado a Bodegas Bothë, forman parte de un mismo punto gastronómico y cultural de Querétaro, un paraje que guarda una excepcional riqueza en todos los sentidos.
Seis etiquetas forman la oferta vinícola de esta bodega queretana de presente desarrollo. Su viñedo aún se encuentra en construcción, sin embargo, la sede de la bodega en el Centro Histórico de Villa Progreso ofrece espacios con solera para conocer sus procesos y disfrutar de sus vinos.
Una entidad con tradición
Los antiguos pobladores bautizaron como Bothë a esta región, se trata de un sitio que siempre ha estado ligado a los pueblos originarios de la zona. Mujeres que han conservado la tradición gastronómica más antigua y hombres que trabajan el ixtle y la recolección como les enseñaron sus antepasados.
La vendimia de Bodegas Bothë se realizó en las calles principales de Villa Progreso, los asistentes disfrutaron de la gastronomía tradicional, tacos de tantarrias, mole de xoconostle, conejo en mole, tortas de hoja de palma o los típicos quelites; todo esto acompañado de un buen pulque o un vino de la casa.
El arte y la música también estuvieron presentes para dar vida a una fiesta tan original como vistosa. Las autoridades acompañaron a los asistentes y agradecieron la realización de esta vendimia que marca la incursión de esta región en las fiestas de la venida del estado.
En Villa Progreso vive la leyenda de la cocina más auténtica, la que se escribe y habla en otomi, la que se marida con vino de Bodegas Bothë y se abre camino entre los vinos más queretanos.
