Un hotel ideal para pasar un fin de semana, alejarse de la rutina, relajarse, disfrutar de la naturaleza y divertirse nadando, tomando el sol, leyendo un libro o realizando cualquiera de las actividades al aire libre con las que cuenta. Con 28 habitaciones, el hotel es un parador turístico de la zona de Tzibanzá, con vista al lago y a la isla, tiene un restaurante con lo mejor de la comida local, alberca y habitaciones equipadas, desde suites, hasta habitaciones sencillas.